03 May Límites de responsabilidad… ?
Comprueba los límites de responsabilidad que tiene tu empresa de transporte.
Antes de permitir que un transportista envíe tu carga, es muy importante que conozcas los límites de responsabilidad, o seguro, que tienen para cubrir tu carga. No des por sentado que te reembolsarán el 100% de los envíos dañados o perdidos, aunque sea culpa suya.
Desde la desregulación, los transportistas pueden limitar su responsabilidad basándose en las tarifas que cobran, y no están obligados a informarte de estas limitaciones.
Por ejemplo, la mayoría de los transportistas aéreos de carga limitan su responsabilidad a 0,50 $ por libra. Eso significa que un envío de 450 kg valorado en 6.000 $ sólo recibiría un reembolso de 500 $ si se perdiera o resultara dañado. Aunque se trata de un caso extremo, no es infrecuente.
Muchos de los principales transportistas de tipo «común» han disminuido la responsabilidad máxima de 25,00 dólares a 10,00 dólares por libra. Y muchos han deslizado una cláusula «por pieza, por libra» para limitar aún más su responsabilidad financiera por envíos perdidos o dañados.
Así es como el «por pieza, por libra» actúa en tu contra:
Supongamos que envías 10 cajas de piezas que suman 1.000 lbs / 450 kgs y que tienen un valor neto total de más de 10.000 $. Supongamos también que una de esas cajas valía más porque contenía una pieza o equipo caro necesario para ensamblar los productos de las otras cajas. Durante el envío, esa caja que contenía las piezas o el equipo caros se pierde o resulta dañada.
Mientras no se aplicara ningún otro límite de responsabilidad, podrías reclamar hasta 10.000 $ por esa única caja, porque el envío total estaba cubierto (1.000 lbs x 10 $).
Según la norma de responsabilidad «por pieza, por libra», el máximo que podrías reclamar por la misma caja de 100 libras sería de 1.000 $ (10 $ x caja de 100 libras).
Eso supone una diferencia de 9.000 dólares en la cobertura de tu envío.
La mayoría de las veces, los transitarios preguntan el valor del envío para poder comprobar los límites de responsabilidad del transportista e informar al cliente de lo que está cubierto y lo que no. Sabiendo de antemano cuál es el riesgo, los expedidores pueden protegerse contratando un seguro adicional o simplemente buscando otro transportista con mejor cobertura.